viernes, 5 de agosto de 2016

Mi experiencia en Málaga

Durante tres meses, el municipio de Benalmádena, en la provincia Málaga, me acogió a mí y a 49 compañeros más –provenientes de varios estados de la República Mexicana– en una aventura profesional, con el fin de cumplir con las actividades del Curso de Experto Universitario en Planificación Urbanística y Organización del Territorio, organizado por los Programas Spamex, el Instituto Mexicano de la Juventud y la Universidad de Málaga.

Dicho curso tenía como objetivo conocer la normativa jurídica que se maneja en España y la Unión Europea con relación a aspectos como urbanismo, arquitectura, sostenibilidad, medio ambiente, entre otros. Para ello fuimos partícipes de múltiples exposiciones, conferencias, visitas guiadas a sitios y a ayuntamientos localizados en pueblos pequeños.

De este modo, se formó un vínculo más que profesional entre los compañeros. La oportunidad de compartir conocimientos y formas de vida de cada estado enriqueció mi conocimiento al poder apreciar que en mi país se viven diferentes contrastes sociales entre cada ciudad y cada estado.

Pese a que el curso estuvo más enfocado a estudiantes de Derecho y Leyes, y nosotros somos en mayoría técnicos especializados en arquitectura, los coordinadores hicieron un esfuerzo por comprender nuestro enfoque. Incluso aunque esto no se esclarecía en la convocatoria oficial, a pesar de las fallas de logística y comunicación, la información improvisada, poco formal, ambigua la falta de profesionalismo y el trato entre coordinación - alumno, fue un curso en el cual aprendí mucho y, por ello, extiendo el reconocimiento y agradecimiento únicamente a la Universidad de Málaga.

Termino mi estadía en España muy agradecido con la universidad y mis compañeros, por las experiencias que pude compartir y vivir con ellos, y por los aprendizajes que adquirí de manera individual al momento de estar en otras ciudades y observar contextos históricos distintos a mi realidad cotidiana.